1. Poniendo la práctica organizativa a la acción. En SONG, nuestra práctica organizativa ha estado basada por mucho tiempo en el amor, el anhelo, y el deseo, a través de divisiones de clase, raza, género y comunidad. Esta acción nos permitió demostrar nuestra creencia colectiva en un destino colectivo en el que los sueños, demandas y esperanzas de mujeres negras de todas las variedades en el centro. Nuestro vaso colectivo se desbordó localmente y regionalmente con tarjetas de regalo, ramos de flores, ropa, servicios ofrecidos por profesionales locales, donaciones de costillas de res, bolsas de donaciones, casas inflables para niños, voluntarixs, miembrxs, y simpatizantes que llegaron a ayudar por 16 horas seguidas, y luego regresaron el día siguiente para hacerlo de nuevo. Desde donaciones de cigarrillos “loosies” y globos, abrazos, cartas y testimonios, hasta tener platos de porcelana reales cuando ellas regresaban a su hogar, esta acción nos dejó con lágrimas en los ojos una y otra vez a muchísima gente en el sur.
2. Realzando la crisis cambia la política, así como los corazones y las mentes. Sabíamos que el sistema de pago de fianzas en efectivo era horrible y destructivo, en base al trabajo de muchas organizaciones a través del país a lo largo de los años y en nuestras propias experiencias vividas, pero esta acción magnificó la crisis. Resonó con gente negra independientemente de su clase social. Mucha gente negra ha sufrido la experiencia de juntar dinero para sacar a unx amigx o familiar de la cárcel. Mucha gente nos cuestionó y levantó objeciones a nuestro enfoque en mamás negras. Pero nosotrxs debemos cuestionar: ¿Porqué las mamás negras son seleccionadas y enjauladas en proporciones más grandes? Vimos esta acción como una de las muchas maneras en que un movimiento unificado puede demostrar lo que significa ser pro-negrx. Independientemente si estamos haciendo alcance comunitario o hablando con nuestrxs vecinxs y familiares, la mayoría de la gente dijo SI donde fuera que íbamos. Esto creó otra oportunidad de hablar con desconocidxs, ir más allá de nuestros círculos, y darle a la gente y a nosotrxs mismxs la oportunidad de comprar nuestra libertad mutua y de ser invitadxs a una lucha de más largo plazo para finalizar con la fianza en efectivo.
3. La misma bestia y diferentes manifestaciones a lo largo del sureste. Esta acción fue una manera revolucionaria de mapear, desenredar, y entender cómo funcionan los juzgados, las cárceles, y el sistema de fianzas en nuestras comunidades. Las llamadas telefónicas semanales de asistencia técnica estaban abiertas a nivel regional y nacional y nos permitieron aprender, luchar, comparecer, y crecer en conjunto. Entendemos ahora con mucha más profundidad y matiz que lxs tomadores de decisiones, la discreción de lxs jueces individuales, magistradxs, y fiscales, los puntos de presión, y las barreras estructurales para cambiar el sistema. También entendemos con mucha más profundidad y matiz cómo funciona el sistema de fianzas por pago de efectivo. Aunque tiene resultados e impactos similares en nuestras comunidades, varía mucho a través del sur. Lxs jueces juegan un papel central en determinar la fianza de una persona, y frecuentemente toman esta determinación sin tomar en cuenta la habilidad de pagar que tenga la persona. Estados como Arkansas tienen reglas estructurales que requieran el uso de compañías de bonos de fianza y tener que poner garantías materiales como sus hogares, vehículos, etc. Lxs prestamistas de fianzas usan su discreción y frecuentemente se niegan a otorgar fianzas si no creen que van a lucrarse. La presunción contra otorgar fianzas por jueces en Virginia es tan extrema que lxs organizadores en Charlottesville, VA no pudieron sacar por fianza a nadie. Estamos más clarxs que nunca sobre el próximo paso en nuestro trabajo y es el de abolir el sistema de fianza en efectivo.
4. Encontramos aliadxs y enemigxs dentro del sistema criminal legal. El sistema criminal legal es una bestia odiosa. Esperábamos encontrarnos con enemigxs que condenarían y buscarían desanimar esta acción. Pero también encontramos que había gente trabajando dentro del sistema que se volvieron aliadxs tácticos para nosotrxs – desde mujeres negras que trabajaban como oficiales penitenciarios en las cárceles quienes ayudaron a pasar formularios hacia las mamás que estaban encarceladas, a los prestamistas de fianzas que bromeaban que los íbamos a dejar sin trabajo y de todos modos nos pagaron el almuerzo. Guardianes, carcelerxs, defensores públicos, y lxs procuradores en ALGUNOS sitios ayudaron profundamente, nos apoyaron, y a veces incluso moldearon o cambiaron las reglas para ayudarnos. Pero en otros lugares, ellos fueron completamente obstruccionistas al nivel máximo posible. En general y en el futuro, sabemos que lxs aliadxs tácticos no son comunes y que debemos esperar oposición y hostilidad en todos los niveles. Entendemos la individualidad de los individuos que han jugado papeles en perpetuar el sistema de opresión, y encontramos humanidad en algunxs. Esto no se trata de manzanas podridas comparadxs a una ocasional buena persona. Esto es un recordatorio de que todxs podemos ser transformadxs en el servicio de una visión más amplia, aún por un solo día. Nuestras siguientes preguntas deben ser: ¿Cómo utilizamos a estxs aliadxs mientras construimos el poder local para eliminar el sistema de fianza en efectivo pueblo por pueblo?
5. El desastre de la red de protección social. La ruptura entre los servicios sociales y la organización comunitaria es inmensa y necesita ser remendada en la mayor medida posible. La gente no puede organizarse para obtener poder si no pueden acceder a necesidades básicas, y la organización de base no es el lugar de poder acceder a todas esas necesidades. Cuando organizamos, debemos también buscar maneras de encontrar y redistribuir recursos para construir lo que necesitamos. En Charlotte, tienes que probar que has estado desamparado por dos años para poder entrar en un albergue. En Durham, tienes que estar presente para una admisión que ocurre solamente una vez a la semana y acordar realizar devociones diarias y trabajo físico entre otras restricciones. Otro albergue en Durham requiere identificación estatal válida, la cual no puedes obtener a menos que tengas un domicilio, y 7 días de ropa limpia. A nivel local, nuestros equipos no estaban preparados ni tenían las relaciones establecidas para conectar a lxs que estábamos liberando bajo fianza para conectarlxs a todo lo que necesitaban inmediatamente. Después de registrar las intervenciones que necesitan realizarse, haremos un trabajo mejor y de manera diferente la próxima vez. A cada vuelta encontramos barreras, desde el acceso de vivienda segura y accesible, a beneficios de discapacidad, a estampillas para comida, a cuidado de salud mental y cuidado de salud básico, a cuidado infantil, a transporte, y más. Es esta acción, algunos de nuestros momentos más desgarradores eran mujeres que nos decían que permanecer en la cárcel era su única opción de sobrevivencia en lugar de morir afuera. ¿Entonces que debe ser construido y demandado de nuestros presupuestos de ciudad y condado para que nuestra gente realmente esté libre de todas las trampas del sistema?
6. Necesitamos más habilidades y magia para poder identificar a nuestras madres y cuidadorxs trans y no normativo que están encarceladxs. Muchxs tuvieron que ser recordadxs que mamás negras incluyen a mamás y cuidadorxs trans. Nuestras familias elegidas han surgido por el amor, el sufrimiento, y a veces por el abandono. Nuestra capacidad de amar, proteger, y cuidarnos mutuamente se extiende más allá de quién nos parió. La autodeterminación de las mujeres trans no es honrado cuando es ingresada a una cárcel. En la mayoría de los casos, su género se registra en base a la discreción de lx oficial que la ingresa. Necesitamos más apoyo y consejo para encontrar a nuestras madres y cuidadorxs trans y poder sacarlas. Una y otra vez preguntamos, demandamos respuestas, investigamos, y trabajamos para intentar encontrarlas y liberarlas, pero no pudimos. Las cárceles intencionalmente esconden y desplazan a las personas trans y no normativas para que sea difícil, si no imposible, encontrarlas.
7. “Pero, ¿a quién van a sacar”? Una visión abolicionista es la luz orientadora. Esta acción probó y fortaleció la visión y práctica abolicionista de SONG de muchas maneras diferentes. Nuestra creencia que la transformación es posible, que ningunx de nosotrxs debe estar guiadx por acusaciones, y, sobre todo, que nadie debe estar en una jaula. A lo largo del proceso, tuvimos que resistir el estribillo de lxs que apoyan el sistema y a lxs detractores, quienes querían saber por qué fueron arrestadas estas madres y cuidadorxs y juzgando si realmente merecían estar libres. Y, si, cada equipo local tuvo que tomar decisiones sobre a quién se podía liberar y a quién no. Algunos factores y cada matiz de cada mujer fueron desempacados antes de tomar cada decisión. Modelamos, a lo mejor de nuestra habilidad, cómo debe verse la valoración de necesidades en comparación a la valoración de riesgos cuando una persona recibe el debido proceso legal. Lo que si necesitan para sobrevivir y vivir sus vidas completas en el mundo exterior en comparación al riesgo que puedan o no enfrentar. Una meta clara con aspiraciones visionarias nos da la oportunidad de practicar nuestra política abolicionista de una manera no fundamentalista. No un enredo de palabras y teoría, pero una oportunidad de abordar juntos la pregunta sobre cómo se mira en la práctica unas reformas no reformistas de nuestro sistema criminal legal. No tenemos ilusiones sobre qué es necesario para seguir construyendo nuestra política y práctica abolicionista, y porqué es una necesidad.
8. Cuando estás haciendo algo correcto, la acción se mueve más rápido que tú mismx. El hacer intervenciones directas en nuestras comunidades creó una reacción en cadena que multiplicó el ímpetu de la acción. Estuvimos abrumadxs con la energía y la respuesta en recaudación de fondos, artículos de medios y entrevistas, y su diseminación por los medios sociales. Pero mucho antes de que la acción tuviera una presencia tan pública, sabíamos que estábamos haciendo algo correcto en base a la respuesta comunitaria. Como dijo Cara McClure de Black Lives Matter de Birmingham “La gente en mi ciudad estaban encendidas con esto e hicieron todo lo posible para llegar a la meta. Cuando yo vine por primera vez a hablar con las mujeres y les dije sobre las fianzas, ellas lloraron de emoción”. Casi todxs dijeron SI no solamente a pagar fianzas, sino también para hacer impacto tangible en la vida de las personas. En Atlanta, las mujeres en el banco incluso ofrecieron imprimir y distribuir más volantes. La gente donó el cambio de los ceniceros de sus vehículos. La acción se volvió tan grande que no podíamos mantenernos al tanto. Logramos cumplir el reto al ser vulnerables y honestos con nuestras imperfecciones, apoyándonos mutuamente a través de la región, y enraizándonos en los principios claves que guiaron a SONG y esta acción. Entendimos lo que significa cuando otrxs entendieron la visión, la asumieron como propia, y la llevaron a cabo de la manera que sintieron era mejor. Esta acción no pertenecía a SONG, sino más bien a todxs lxs que trabajaron en ella.
9. Podemos y debemos ser pro-negrxs en nuestro trabajo organizativo multirracial. En estos días, se necesita urgentemente el trabajo organizativo multirracial con liderazgo negro en posiciones claves. Nos comprometemos colectivamente en volvernos mejores, más fuertes, y más precisos en cómo lo hacemos. Independientemente de clase, raza, lugar, género, condición migratoria, y orientación sexual, la gente respondió rotundamente a la visión y demanda de esta acción. Nuestrxs camaradas latinxs, inmigrantes, asiáticxs, árabes, del medio oriente, indígenas, blancxs, y de raza mixta se hicieron presentes y aportaron para darle libertad a las mamás negras. Desde sacudir el árbol de billetes, hasta dar transporte por semanas, hasta bendecirnos con ollas de tamales, todxs jugaron un papel. Este trabajo pide y requiere que nosotrxs afinemos como entendemos la práctica de organización comunitaria pro-negra, sin reservas. Nos retamos a nosotrxs mismxs a venir con incluso más valentía la próxima vez. Para lxs que somos blancos, inmigrantes, y gente de color no negrxs, continuaremos erradicando la indecisión y cambiar de ser pro-negrxs en nuestra retórica a ser pro-negrxs en nuestras acciones. Retamos a lxs que no son negrxs a estar dispuestos a ser transformadxs en el servicio al trabajo y no simplemente realizar tareas fáciles. No necesitamos a gente blanca y de color no-negrx pasivos y asustados en este movimiento, sino a gente que va a ser audaz y no tener reservas de avanzar una agenda pro-negra y que aman a la gente negra más de lo que odian al estado.
10. Este es apenas el comienzo. Es desgarrador ver los escombros y el impacto del sistema criminal legal en las familias negras. Nuestra gente está en jaulas, perdiendo sus familias, sus empleos, sus carros, y su paz mental. Entre más tiempo es secuestrada nuestra gente, más difícil es para que nuestra gente sobreviva fuera del sistema. Entre más pagamos fianza para nuestra gente, más tendremos que exponer el sistema de pago de fianzas en efectivo y lxs pendejxs que se lucran de nuestros cuerpos y nuestro sufrimiento. Después de esta acción, son más claras que nunca las posibilidades de preparar el terreno para campañas que acaben con el pago de fianza.
¿Quieres participar en la próxima ronda de pago de fianzas y confrontar estas prácticas y pólizas horribles de dinero en tu comunidad? Contáctanos al takeaction@southernersonnewground.org. También visita el sitio web de National Bail Out, nomoremoneybail.org.
Si alguien ha sido encarceladx en tu comunidad, déjanos saber por medio de takeaction@southernersonnewground.org. No podemos prometer nada, pero queremos por lo menos saber sobre los diferentes casos, y poder ofrecer recursos potenciales, ya sea fondos de fianza o círculos de donación en sus áreas locales.
One response to “10 Lecciones Aprendidas de Las Acciones de Fianzas para Mamás Negras”